Estructurado internamente en seis movimientos fotográficos referidos a distintos momentos del destino contemporáneo de México, los diferentes capítulos del libro marcan rupturas en la continuidad de una historia que vincula a una persona con una comunidad que no es la suya pero a la que se halla irremediablemente unida. El libro en su conjunto compone un complejo retrato que se nos presenta como un prolongado descenso de la sociedad hacia el salvajismo ciego.